En tiempos de crisis, manifiesto RIQUEZA

Si la depresión financiera se hace aparente mediante los medios de difusión, me concentro en la Llama de la Ascensión para traer dentro de la vida el vigor ascendente que supera la depresión y la lleva hasta un estado natural de Felicidad y Armonía.

En la semana que ha pasado, los titulares más destacados en diarios y noticieros se referían a la caída de los mercados de valores en los grandes centros financieros del mundo. Para aquellos que estamos informados de la evolución del planeta y de la humanidad que lo habita no es una novedad porque los seres espirituales que están ayudando en este proceso lo vienen anticipando desde hace un tiempo, esta apariencia de mucho para pocos no puede sostenerse.

A veces es difícil abstraerse de esas noticias y terminan afectando nuestra mente y los patrones de pobreza gritan: ¡PRESENTE! Ése es el momento indicado en  que nos pondremos a “trabajar” más fuerte, seremos los Guerreros de la Luz para vencerlos y poder así manifestar la Riqueza, la Abundancia y la Prosperidad que es natural en nosotros y que los seres oscuros se han encargado de que estuvieran bien ocultas.

No son los recursos de un estado, de un espacio los que crean riqueza, sino la actitud frente a la vida, el conocimiento que se tiene y el que se crea para aprovechar las circunstancias en el medio ambiente.

En la mente de los seres humanos existen mentiras, mitos, creencias, prejuicios, éstos son los verdaderos “dragones” a vencer. La única forma de combatir las fuerzas que se oponen al progreso y a la evolución del hombre está en el conocimiento y éste se obtiene con la educación y la información verdadera.

Para resultar vencedores en la batalla con los patrones de pobreza, podemos recurrir a diversas “armas” espirituales y energéticas.

Una de ellas es el sentimiento de Merecimiento, según la visión de Manuel Márquez, español, seguidor de El Secreto,  es la  clave: “Es decir, creer y sentir que merecemos lo mejor, formulando nuestros deseos y esperado los resultados en función de esa certeza, dando por supuesto que el Universo es nuestro aliado más leal en el camino.

Gracias al trabajo interior de sanación emocional  he descubierto que he cargado durante toda mi vida con fuertes sentimientos de culpa debidos a circunstancias dolorosas no resueltas adecuadamente en su momento en la vida de mi familia.

Como diría Alejandro Jodorowsky, no se pueden separar nuestros problemas de los problemas de nuestro árbol genealógico. Por este motivo me he denegado inconsciente pero repetidamente a mí mismo el permiso para recibir los dones de la vida, para ver mis sueños manifestados, en definitiva, para ser feliz.

Ahora que ya sé todo esto, he podido superar este obstáculo permanente y comenzar a sentirme realmente merecedor, consciente y también inconscientemente.

Estoy aquí para darme lo mejor, haciéndome responsable de mis decisiones buenas o malas en todo momento, confiando en la sabiduría infinita del Universo, quien posiblemente, al menos en algunas ocasiones, me brindará algo que no será exactamente lo que yo deseaba, pero que en cualquier caso siempre será lo mejor para mí, si yo he formulado ese deseo desde mi corazón, con un sentimiento pleno de amor propio y merecimiento, nunca desde el miedo, el victimismo o el autodesprecio, todos ellos formas de sentirse culpable.

Pienso que este sentimiento, a la vez de Amor por Uno Mismo y de Confianza en la Sabiduría y Buena Intención de la Vida, es la piedra angular, el cimiento, y el eje de nuestro Poder de Atracción, consciente y eficaz, y que sin él, no es posible obtener ningún buen resultado.

Sin embargo, la culpa que más nos aprisiona, es como afirma Jorge Lomar, de la Escuela del Perdón, un sentimiento que radica en las profundidades del inconsciente colectivo, una herencia ineludible en nuestra condición como seres humanos, ya que nos viene a través de nuestra herencia emocional genética, o de la memoria celular, como la llaman algunos científicos.

Es necesario, por tanto, sumergirse en el inconsciente para sacar a la luz esos nefastos sentimientos heredados, emprendiendo lo que Jung llamó el “Viaje del Héroe o de la Heroína,” para poder reconquistar ese sentimiento de Amor por Uno Mismo y darse permiso para manifestar todos nuestros Sueños.”

Otra forma, según una canalización de Gillian Mac Beth- Louthan, podemos contribuir ayudando a otro “Cuando vean una necesidad de otro, cólmenla energéticamente. Si ven una persona pobre, envíenle bendiciones financieras.”

Podemos también invocar a las energías divinas de la Llama Blanca y a la Hermandad de Luxor  (Maestros Ascendidos dirigidos por Serapis Bey) para que “mantengan la Llama de la Ascensión resplandeciente, resplandeciente, resplandeciente, a través de mis sentimientos, mi mente, mi cuerpo etérico, mi cuerpo físico, mi hogar, mis negocios y todos mis asuntos. Permite a su actividad estimulante elevar todas las cosas en mi mundo hacia el Amor, la Felicidad, la Opulencia, la Victoria y la Perfección  eternamente sostenidos. “  

“Si de repente enfrentamos facturas impagas y gastos inesperados y empezamos una caída libre en el pánico y la angustia .Mientras tanto, una enorme parte de nosotros sabe muy bien, sabe por haberlo experimentado una y otra vez, que el universo siempre provee, que seremos apoyados, que siempre recibimos toda la abundancia que necesitamos a tiempo, cuando confiamos en que así será. ¡Ese pánico y angustia tienden a sentirse completamente sofocantes y cuando nos damos cuenta, estamos perdiendo la cabeza en un ataque de ansiedad! Ése es el momento de detenerse, revivir, sobrevivir. Tomen una respiración, desconéctense de las viejas grabaciones mentales e historias que solían creer en la carencia, contrólense y recuérdense a sí mismos: “¿Qué es lo que estoy pensando? Yo sé que el universo siempre está ahí para mí. Estos gastos inesperados se deben en realidad a la maravillosa expansión de mi vida que yo pedí. Si los gastos se presentaron, ¡entonces también se presentará el apoyo financiero para cubrirlos!” Deben sentirse inmediatamente conectando de nuevo son su Centro, permitiéndose así conectar con el flujo de Energía de la Fuente que está ahí para ayudarles. Es como sentir la diferencia entre inhalar y exhalar profunda y fácilmente, o contener la respiración.” Dana Mrkich

Prosperidad activa, por Jennifer Hoffman 

Nuestro nivel de prosperidad refleja la abundancia que estamos recibiendo, porque están relacionadas. La abundancia es un estado de ser que determina lo que vamos a recibir y luego prosperamos en cualquier nivel y tipo de abundancia que estemos creando. Como con la abundancia, siempre somos prósperos, pero eso no quiere decir que tengamos todo lo que queremos. Con la abundancia fijamos nuestra intención, con la prosperidad recibimos la abundancia relacionada con nuestra intención. La ley de la prosperidad es imparcial y desapasionada, simplemente responde a nuestros pensamientos, energías y palabras. Siempre estamos en un estado de prosperidad, recibiendo los resultados de nuestros pensamientos y palabras todos los días. Y podemos aprender a usar la ley de la prosperidad para crear la vida de nuestros sueños una vez que entendemos que ésta sólo responde a lo que estamos creando, activa o pasivamente.

Cuando prosperamos recibimos más de algo. Aunque nosotros conectamos la prosperidad conla riqueza, ésta no tiene nada que ver con el dinero. Para utilizar los mejores aspectos de la prosperidad, tenemos que conectar con la creencia de que merecemos tener lo que deseamos. El Universo nunca nos dice que no podemos tener algo, pero no nos puede dar más que lo que pedimos ni más que lo que creemos que merecemos. No importa para cuánta abundancia fijemos nuestra intención, nuestras creencias, pensamientos, palabras y acciones establecen si eso se va a convertir en parte de nuestra realidad o no. Y vamos a prosperar en todo lo que podamos recibir, lo cual podría estar muy por debajo de lo que queremos.


Podemos ser activamente prósperos, asegurándonos de estar recibiendo lo que queremos, o pasivamente prósperos, pensando que ya que no tenemos el amor, la alegría, bendiciones financieras o la paz que queremos, somos pobres, indignos y casos perdidos. Entonces nos sentimos impotentes para hacer los cambios que permitirán que nuevos niveles de prosperidad sean nuestros. Algunos tipos de prosperidad, como la carencia, nos hacen sentir incómodos. Otros tipos de prosperidad, como la abundancia financiera, nos hacen felices. El flujo de la prosperidad es dinámico y fluido, pero también depende de nuestra capacidad de permanecer en ese flujo y no limitarlo, sabotearlo ni bloquearlo. Nuestro nivel de prosperidad depende de nuestra intención para la abundancia.


Enfocamos la prosperidad desde el punto de vista de carencia y menos carencia, pero en realidad se trata de mirar el tipo de prosperidad que estamos creando. Cuando empezamos desde el punto de comprender que siempre tenemos prosperidad, podemos entonces enfocarnos en lo que estamos creando, el nivel en el que queremos estar y cambiar las intenciones, pensamientos y creencias acerca de la abundancia, que permitirán que nuevos niveles de prosperidad fluyan a nosotros.


Cuando queremos cambiar el tipo de prosperidad que estamos recibiendo, debemos estar dispuestos a soltar lo que ya no necesitamos o queremos. ¿Qué pensamientos, sentimientos, creencias o juicios sobre ustedes mismos y los demás pueden soltar para poder cambiar el tipo de prosperidad que están recibiendo? Sean activamente prósperos y verán manifestarse los cambios en su vida y crear la prosperidad que desean.