…galáctico
Cuántas
veces en esta vida, nos hemos levantado o nos hemos mantenidos despiertos para
esperar la salida del Sol, para disfrutar ese espectáculo maravilloso, ver un
‘nacimiento’ en todo su esplendor.
De
eso se trata el 21.12.12, esa fecha preanunciada por los mayas hace centenares
de años atrás, el Gran Amanecer del Día Galáctico, un día que dura 12 mil años
terrestres.
Todos
hemos experimentados cómo son las horas previas a la salida del sol, es el
momento de noche más cerrada, oscuridad total, para dar paso al
estallido de luz radiante. Así está viviendo la humanidad estos momentos, en la
oscuridad más profunda.
El
‘Fin del Mundo’ promocionado por los manipuladores medios de comunicación, es un
fin del mundo personalizado, todos habitamos muchos mundos, familiares,
laborales, de estudios, de esparcimiento, de amistad… Cada uno de esos mundos
se ha ido transformando en este tiempo previo al amanecer y es por eso que cada
uno de ellos tendrá un final, porque ya no será como lo era hasta hora.
Cada
ser vivo que habita el planeta pasará por los Tres (3) días de Oscuridad,
y cada uno sabrá si durarán 72 horas de tiempo lineal, si se prolongarán, si
serán en diciembre de 2012 o si ya los vivieron (como yo, que los experimenté
en febrero). Esos tres días, son momentos de instropección, son un
viaje a las oscuras profundidades de nuestro ser terrenal, son ese darnos
cuenta de todo lo que hemos tapado con capas de maquillaje para no ver
dónde había que detenerse a perdonar y sanar; donde hemos permitido que algo o
alguien drenara nuestra energía.
Y
luego de ese viaje, en el que soltaremos lastre, nos sentaremos a esperar el Amanecer
que será también una decisión personal; allí donde se decida echar luz, en el mundo que cada uno
quiera transformar, el Sol alumbrará, para que con luz (Sabiduría) y su calor (Amor)
nos otorgue la fuerza (Poder) para crear mundos nuevos plenos de Armonía y Felicidad.
Qué
este 2012, que en muchas ocasiones hemos sentido como ‘El año que vivimos en peligro’ sea
el trampolín que nos impulse a dar el potente salto que nos permita atravesar
el mar de emociones para llegar al continente dorado que destella brillantes
rayos hacia el cielo (así me lo mostraron en sueños).
Pido
a Dios Padre dar ese salto y encontrarme con ustedes allí.
Sean bendecidos con
el Amor y la Luz Divinos.
Patricia
AmaiA